1- Programe un tiempo tranquilo. 
Ya sea una hora, un día, una semana, un mes o quizás un año de no hacer nada, cancele todas sus citas para ese lapso de tiempo. Dejar a un lado algo de tiempo libre para no hacer nada de forma regular es muy saludable para la mente, el cuerpo y la vida afectiva, sobre todo si encuentras que te sientes muy cansado o estresado. 

 

2- Encuentre un lugar tranquilo y privado para no hacer nada. 
A un lugar que se puede escapar de las presiones que normalmente pesan sobre usted. Este lugar podría ser su dormitorio, el patio trasero o un parque local. Si vives en un pequeño apartamento, a un lado de una esquina de una habitación más grande con cojines en el suelo y una vela con aroma suave. Donde quiera que sea, asegúrese de que puede sentirse cómodo y tranquilo. 

3- Establecer una alarma de algún tipo que suene cuando su tiempo de “hacer nada” ha terminado. 
De esta manera, usted no tiene que estar chequeando constantemente el reloj y contar los minutos, y serás capaz de concentrarte más plenamente en no hacer nada. 

4- Desconectarse. 
Apague su teléfono celular, teléfono del trabajo, PDA, Blackberry, iPad, iPhone, computadora, radio, televisión, y cualquier otro medio de envío o recepción de llamadas o mensajes. Estas distracciones sólo le impiden disfrutar de la nada. 

5- Siéntase usted mismo. 
Siente el viento, el sol en la cara. Escucha el susurro de los árboles, los pájaros cantando, el agua que fluye. No pienses en el pasado o el futuro. Evita la tentación de encender la televisión, escuchar música , escribir una nota para usted mismo, conseguir un bocado para comer o cualquier otra cosa. Lo único que debe hacer es respirar e ir al baño (si es necesario). 

6- Aprende a meditar. 
Despeje su mente de todo pensamiento de trabajo, las preocupaciones, la familia, etc, simplemente dejelos ir. Hacer esto no sólo le permite a su cuerpo no hacer nada, sinó que le permite a su mente también poder disfrutar de la nada. Sin embargo, no te preocupes si te encuentras con dificultades para sacar de tu mente las cosas. La liberación de la mente es realmente muy difícil de dominar, y a menudo requiere una gran disciplina (monjes budistas, por ejemplo, dedican toda su vida en poder liberar a su mente). Por el momento, arroje sus preocupaciones tanto como pueda y disfruta de sentirte más ligero y menos preocupado. 

Encuentra una actividad meditativa. Para algunas personas es más fácil evitar pensamientos angustiantes cuando su mente se centra en una actividad rutinaria. Trate de organizar un jardín Zen , o participar en una actividad repetitiva como tejer crochet. Preste atención sólo a lo que tus manos están haciendo, y no permita que otros pensamientos te invadan. 

7- Practique la relajación muscular progresiva. 
Este proceso puede ayudar a lograr una relajación profunda sin hacer nada. Concéntrese en relajar cada grupo muscular de la cara hasta los pies, lentamente y con respiración lenta y relajada. 

8- Vuelva a sus actividades normales lentamente. 
Cuando su tiempo para no hacer nada finalize, vuelva suavemente a sumergirse en su rutina habitual. Camino de vuelta a trabajar a un ritmo suave, o comienze a utilizar su teléfono, computadora u otros dispositivos de nuevo uno por uno. En el fondo de su mente, trate de mantener algo de la paz que obtuvo con no hacer nada.